Cada postura plantea una metodología distinta para resolver de modos diferentes las relaciones entre teoría y comprobación empírica en el trabajo social.
Historicismo
La escuela historicista surge en Alemania con Windelbland, Wilhelm, Dilthey y Rickert. Se opuso al positivismo en tanto se consideraban que la aplicación universal de leyes, la objetividad y la unidad metódica llevaban al desconocimiento de las características particulares del objeto de estudio en las disciplinas del hombre e implicaba aislarlo de su historia y cultura.
Consideraban que era imposible utilizar la misma metodología para ambas ciencias, ya que en el caso de las ciencias sociales el sujeto es parte del objeto estudiado, a diferencia de las naturales donde ambos se encuentran separados. Las ciencias naturales buscarán explicar relaciones de causalidad, mientras que las sociales se basarán en la comprensión.
Materialismo dialéctico
Esta postura se diferencia de las otras porque se propone entender a la naturaleza humana en su carácter concreto – histórico. Se trata de comprender los mecanismos de formación de las sociedades y los cambios que tienen lugar en estas. Estos cambios son de naturaleza dialéctica, en el sentido en que en las sociedades se producen conflictos que se resuelven por medio de transformaciones fundamentales de la estructura económico-social.
No hay comentarios:
Publicar un comentario